viernes, 11 de junio de 2021

El monasterio de piedra, en Nuévalos (Zaragoza)


¡Buenos días, seguidores de Preciosa Serendipia! Hoy os voy a trasladar a otro lugar de España, que tuve el privilegio de conocer cuando tenía 12 años. Es un paraje que me enamoró y al que tengo muchas ganas de volver con mi marido y mis dos hijas.  Guardo en mi memoria preciosas imágenes y es un lugar mágico, que te envuelve en un aura de tranquilidad.
Os adentro en este lugar que me robó el corazón cuando tan solo era una niña.

 El Monasterio de Piedra fue adquirido en 1843, por Don Pablo Muntadas Campeny, a través de una Subasta Pública por 1.250.000 reales.
Fue en los años siguientes cuando Don Juan Federico Muntadas, hijo del anterior, transformó la huerta existente en un jardín paisajista y las dependencias conventuales en una instalación hotelera e hidroterápica. A ello añadió la construcción de una piscifactoría en 1867, que fue pionera en España y de la que todavía pueden verse algunas de sus pesquera originales al visitar el Parque.

Desde entonces hasta nuestros días, El Monasterio de Piedra se convirtió en un destino turístico de primer orden. La adquisición de la Propiedad por la familia Muntadas, la transformación del monasterio en un Hotel y los nuevos usos turísticos que se dieron a las dependencias frenaron su degradación, después de la desamortización de Mendizábal en 1835, y lo han preservado como en la actualidad.

    Fuente:  https://monasteriopiedra.com

Como muy bien dicen en la página oficial del Monasterio, su recorrido está lleno de rincones preciosos.   Lo que más recuerdo de este lugar, es el sonido de las cascadas. 
Fue una sensación mágica que me produjo muchísima serenidad. Y a eso hay que añadir un bello río, unos lagos preciosos y el canto de los pájaros de más de 20 especies distintas. ¡ Una auténtica joya de la naturaleza!
 Os dejo algunas imágenes para que os hagáis una pequeña idea:














     Fuente: https://monasteriopiedra.com/

   

Un entorno precioso, ¿verdad? Estoy deseando volver para disfrutar de este paraje. Estoy viéndome allí, con mi último libro en mano y de fondo con una canción de Enya. Tiene un repertorio maravilloso y es difícil elegir una. Pero me quedo con esta canción. ¡Disfrutadla!

                                                                Namasté.

                                                     Vanesa Blamco Santiuste.

                                                    


1 comentario:

VALERIAAA dijo...

¡Hola! Un precioso lugar, a decir verdad. Espero poder visitarlo algún día.
Besos ♥